Hoy en día existen distintos pensamientos en redes sociales respecto a dietas y ejercicios, sabemos que dicen: “Si no eres fit es porque no te amas” o qué tal el: “El azúcar, pan, lácteos están prohibidos”, y el más común: “NO DAYS OFF, NO PAIN NO GAIN”. También esta por otro lado el pensar que querer perder peso es señal de que te odias y que deberías de dejar de hacerlo y con ellos escuchamos comentarios tales como: “No busques mejorar tu cuerpo, la salud no se mide en kilos”.
Sabemos que es complicado estar saturados de información e ideologías diferente, por eso en FEIM nos preocupamos por hacerte saber como encontrar el punto medio.
La mayoría de las personas al empezar dietas empiezan con dietas bajas en calorías, sin darse cuenta que estar tan restringidos genera un estrés y mal humor que a veces nosotros mismos no vemos que es a causa del régimen alimenticio que estamos llevando; el hacer ejercicio diario tan exigentemente y salirse de la dieta un día es un castigo porque según lo que creen “es el camino para cumplir el objetivo”. Realmente todas esas restricciones son una perdida de tiempo y energía porque no son necesarios para bajar de peso.
Si nos vamos al otro extremo, hay casos donde no se es constante en el ejercicio, realizar comidas no saludables, descuidarse y ni hablar de la disciplina; haciendo que no te sientas bien ni física ni mentalmente; cuando realmente lo que funciona para cumplir metas y sentirse pleno y feliz en el camino es vivir en el BALANCE. Quien es disciplinado en la alimentación y entrenamiento porque ama hacerlo, pero también quien a veces se come una hamburguesa o falta al gym y ya no siente culpa. Este equilibrio sin extremos es el que nos enseña a amarnos más.
El amor por tu cuerpo no se define por la perdida de peso o la falta de ella. Puedes amarlo y querer mejorarlo, como también amarlo sin querer cambiarlo.
¡Haz aquello que te haga feliz y le haga bien a tu cuerpo y salud mental!